jueves, 3 de enero de 2008

Estudio sobre el movimiento de la cobra

De todos es sabido que la cobra es un bichillo que vive a ras del suelo y ataca a sus victimas cuando están desprevenidas.
Su movimiento rápido y preciso paraliza a sus victimas dejándolas atontadas en el suelo.

Hace ya mucho tiempo que un estudioso del tema un tal Carlos Wind ( seudónimo , quiere permanecer en el anonimato), (surfero de poco viento y practicante del pedal los días de leveche), que creo el movimiento cobreti, una extrapolacion del llamado, entre los surferos, movimiento de la anguila : dicese al salir de la ola la tabla para un lado y el surfero moviéndose como una anguila para el otro.

Este estudioso, a partir de ahora C.W, sentó las bases del movimiento cobreti un día que bajaba hacia Perin y paro a reflexionar sobre su forma de afrontar los palmitos, pedregales, raíces y demás elementos de la naturaleza, y estando absorto en estos pensamientos observó en el cielo una nube con forma de cobra.

Estos fueron sus pensamientos que desde entonces han sido traducidos a 17 idiomas y esta aceptado por todos los practicantes de cualquier deporte como una realidad incuestionable.

Todos nosotros en algun momento de nuestra vida haremos la cobra.
La cobra puede estar escondida en cualquier sitio y lugar.( Todavía se recuerda en los foros la picadura y consecuente movimiento cobreti realizado por un tal Meroñin mientras iba en línea recta )
En estado cobreti solo se puede permanecer durante un muy corto periodo de tiempo, aunque puede ser repetitivo y hasta cíclico, llegando sus consecuencias a ser en algunos casos extremos hasta catastróficas.
Hay personas más proclives a realizar este moviendo llamado de la cobra o cobreti, pero siempre en contra de su voluntad.
Para saber lo cerca que esta la cobra y como consecuencia su movimiento solo hay que observar el grado de diversión, a mas diversión mas cerca esta la cobra, hay quien dice que han llegado a notar su aliento, pero esto esta a falta de confirmar.
Al igual que en la naturaleza hay cobras grandes y cobras pequeñas, sus picaduras y consecuente movimiento cobreti, son directamente proporcional a su tamaño.
No podemos escondernos de la cobra.
La cobra no se cansa de esperar y acecharnos, esta demostrado que puede pasar meses sin comer ni picar entre horas.











Modo en que afecta a los practicantes del MTB, la picadura de la cobra.

Aunque no a todos nos afecta por igual, podemos decir que en mayor o menor medida estos son los síntomas.

· Creencia por parte del ciclista de haber experimentado una sustancial perdida de peso instantania debido en gran parte a la facilidad para volar que te hace sentir su picadura.
· Necesidad imperiosa de separarnos de nuestra bici, si sientes esto, con lo que queremos a nuestras bicis, no lo dudes, te ha picado la cobra.
· El tiempo se acelera, digamos que cuando eres picado por la cobra el día tiene 12 horas.
· Al rebotar de piedra en piedra se toma conciencia de que no somos de goma.
· Al picarte la cobra e instantáneamente después de realizar su movimiento se genera en nuestro cerebro una habilidad innata para inventar excusas. Muchos estudios han demostrado que aunque no veamos a la cobra picar al ciclista podemos saber si realizo su movimiento escuchándolo atentamente, si dice algunas de estas frases es que ha sido picado:
· Se me ha salido el pedal
· No he visto la piedra
· No se que ha pasado
· La abuela fuma
· Necesidad inmediata de cagarse en algo.
· Me cago en la hostia
· Me cago en to lo que se menea
· Me cago en la puta …etc

· Aunque parezca increíble esta demostrado que cuando se va en grupo a los no picados también les afecta, exteriorizándose en forma de risa colectiva.

· Entre los ciclistas se puede saber el tamaño que tenia la cobra midiendo la distancia de separación entre bicicleta y ciclista después de una picadura, a mayor distancia mayor era la cobra, aunque hay tablas para esto he creído oportuno no reproducirlas.

Conclusion

Ultimos estudios realizados y después de verificar cientos de casos de picaduras se ha llegado a la conclusión que rara vez pica en subida y casi siempre en bajada, estos estudios demuestran que esto es debido a que mientras subimos vamos dando pedales y ese movimiento circular hipnotiza a la cobra anulando su ansia de picar a nadie, sin embargo cuando bajamos, los pies no se mueven, estando siempre en un plano paralelo al suelo al alcance de la cobra.
Por tanto y después de muchas jornadas de estudio y reflexión he llegado a la conclusión que para que no nos pique mas la cobra hay que bajar dando pedales.
FIN.

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